El número de casos nuevos de COVID-19 reportados en todo el mundo subió por quinta semana consecutiva, mientras que el número de muertes se mantuvo relativamente estable, según informó la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En su nota semanal sobre la pandemia, la agencia de salud de Naciones Unidas informó de 5.7 millones de nuevos contagios confirmados la semana pasada, un incremento del 6%. Se registraron 9,800 muertes, una cifra similar a la de la semana anterior.
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo esta semana que la pandemia seguía siendo una emergencia global y que estaba “preocupado” por el aumento.
“El virus circula libremente y los países no están gestionando de forma eficaz la carga de la enfermedad”, dio en una conferencia de prensa el martes. “Las nuevas olas del virus demuestran de nuevo que el COVID-19 está lejos de terminar”.