Columna: Desde el otro lado

Por Luis Rodrigo Guzmán Viniegra

Hace poco más de veinte años, el artista y productor, Sergio Arau, produjo una película llamada “Un día sin mexicanos”. En la película, que es una sátira con tono de comedia, se ve a través de un falso documental, cómo una extraña neblina rodea la frontera de California y la aísla del resto del mundo, al mismo tiempo que todos los habitantes de origen hispano desaparecen misteriosamente. De pronto, hay una escasez de policías, maestros, sirvientas, meseros, cocineros, lavacoches, entre muchos otros oficios y no hay quién cultive las cosechas. Un senador, que siempre se opuso a los migrantes, tiene que ocupar la posición de gobernador porque éste también desapareció. De pronto se hace evidente que el estado no puede funcionar sin los migrantes.

Esta película, que, si bien es una comedia, realmente refleja la realidad de todo un país. Estados Unidos funciona con la mano de obra migrante. Las redadas que comentamos en la columna anterior son más una acción de propaganda que una acción real de acabar con los migrantes. Si se quisiera acabar con la mano de obra ilegal se usarían los canales administrativos, no hacen falta redadas para que las empresas identifiquen a cada uno de sus trabajadores y los cotejen contra los números de seguro social que les darían derecho al trabajo. La realidad es que la economía depende de esta mano de obra, nos guste o no.

Algo que es de suma preocupación para el gobierno es la entrada legal de personas que, usando visas de turista o de estudiante, deciden quedarse a trabajar ilegalmente aquí. Este factor está volviendo cada vez más restrictiva la entrega de visas. En primer lugar, las visas de estudiante ahora van a pasar por filtro adicionales que implican investigaciones más exhaustivas e incluyen la identificación de afinidades políticas de los solicitantes. De la misma forma con las visas de turista, que quizá no tengan investigaciones tan profundas, pero ya incluyen la obligación del solicitante de poner público su perfil de redes sociales para ser analizado.

Mientras Trump continúe en el poder seguiremos viendo que las restricciones aumentan, antes de disminuir. Y más ahora con la nueva participación de los Estados Unidos en el conflicto de Israel e Irán, que le suma un factor adicional, tratar de identificar lo que se conoce como “sleeper cells” que no es otra cosa que grupos que están en contra de los norteamericanos y a favor de Irán, pero que viven dentro de Estados Unidos como cualquier otro ciudadano manteniendo un bajo perfil, pero están listo para generar caos o violencia si son activados.

Por otro lado, hay que mencionar que la polarización ha aumentado. El desfile militar que se inventó Trump para el día de su cumpleaños, se vio opacado por las manifestaciones “No Kings” en todo el país, que rechazan el autoritarismo que ha demostrado Trump en todas sus decisiones. Hay que recordar que desde la época de Vietnam no veíamos a un presidente usar a la Guardia Nacional sin la aprobación del estado donde la usa. De la misma forma, los bombardeos en Irán no fueron aprobados por el Congreso y hay que recordar que solo unos días antes, varios congresistas, incluyendo algunos Republicanos, estaban exigiendo que antes de que se tomara cualquier acción militar se aprobara la misma por el Congreso.

Con todo este contexto podemos ver que la situación en lugar de mejorar, tiene a complicarse. Los precios del petróleo empezarán a subir como consecuencia del nuevo conflicto y mientras se mantenga la inestabilidad no vamos a ver que la situación de otorgamiento de visas mejore. Apenas hace unos días le cancelaron la visa al alcalde de Puerto Peñasco, en Sonora, y todo indica que hay toda una estrategia para cancelar visas de funcionarios públicos. No queda claro cuál es el origen de estas cancelaciones, pero lo que sí es evidente, es que hay trabajo de investigación y perfilamiento que está ya afectando a políticos en todo el país.

Hasta aquí dejo mis comentarios, agradezco su lectura y sigo leyendo sus comentarios… Desde el otro lado.

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