Tras 15 días de la pugna del narcotráfico, Sinaloa suma 79 asesinatos, 70 desaparecidos, el robo de 98 vehículos y pérdidas por más de 5 mil millones de pesos, denunció este lunes la senadora Paloma Sánchez Ramos, de dicha entidad.
La senadora del opositor y antes hegemónico Partido Revolucionario Institucional (PRI) lamentó los hechos ocurridos desde el pasado 9 de septiembre, cuando la fractura al interior del Cártel de Sinaloa, por la captura de uno de sus fundadores, Ismael el «El Mayo» Zambada, permeó con violencia en ese estado.
La legisladora calificó en un pronunciamiento de «inaceptable» la «indolencia e incapacidad» de las autoridades del gobierno de Andrés Manuel López Obrador y del estado, gobernado por el oficialista Morena, para garantizar la paz y tranquilidad a la población de esta demarcación.
Además, consideró que Sinaloa está inmerso en un clima de incertidumbre, temor e inseguridad, que también han afectado la actividad económica de los sinaloenses, con daños superiores a los 5 mil millones de pesos.
“Ya son dos semanas durante las que las y los sinaloenses están secuestrados en sus casas, dos semanas en las que personas inocentes como Juan Carlos Sánchez (el civil que intentó salvar a su bebé) son asesinados frente a sus familias. Dos semanas de indolencia y de incapacidad para que haya paz y seguridad en Sinaloa”, enfatizó.
En este sentido, reitero su condena a las autoridades por no contener la creciente ola de violencia y detener el clima de terror, así como para mitigar las pérdidas económicas.
“Están acabando con los negocios, con los sueños de jóvenes empresarios y de trabajadores que sólo quieren darle de comer a sus hijos”, expresó.
Las autoridades han informado de por lo menos 30 enfrentamientos con el crimen organizado, la incautación de más de un centenar de armas de fuego, 75 vehículos y más de 40 detenciones.
Entre los arrestos destacan el de Mario Alexander Gámez Cuevas, conocido como «El Piyi», presunto líder de sicarios relacionado con la fracción de Los Chapitos o La Chapiza.
Tan sólo el fin de semana pasado, hubo un enfrentamiento entre policías civiles, Fuerzas Armadas y presuntos integrantes del crimen organizado que resultó en dos militares heridos, tres supuestos criminales abatidos y otro más capturado.
El sábado pasado, autoridades confirmaron el despliegue de 600 nuevos elementos militares para reforzar las acciones operativas y de disuasión de la violencia en la entidad, mismos que se sumaron a una plantilla de mil 600 elementos castrenses que ya se encontraban en Sinaloa.