En el PRI estamos trabajando muy a fondo para poner al partido al día, buscando la unidad entre sus militantes, en reestructurar su comité directivo estatal y volver a activar los comités directivos municipales, así como restablecer la conexión con la gente para volver a ser una opción política de peso, afirmó ayer ante los periodistas de la Mesa Cancún, el dirigente en Sonora del tricolor, Rogelio Díaz Brown.

Y agregó que ante el enorme reto de haber encontrado al partido sumido en lo que es quizá la crisis más grave de su historia, no lo detendrá ninguna «grilla» interna con pretensiones de dividir a los priistas que pudiera existir, pues el PRI es la casa de todos sus militantes y en ella caben las más diversas corrientes de opinión. «Las puertas están abiertas para todos».

En lo que fue su quinta visita a la Mesa Cancún, a lo largo de su trayectoria política y de gobierno, el «Roger» Díaz Brown definió la postura del tricolor sobre varios de los aspectos que dominan la agenda mediática en estos momentos.

Señaló que están inmersos en la realización de giras por todo el estado, en el empadronamiento o reafiliación de su militancia; el redimensionamiento de sus organizaciones filiales, además de haberse ya renovado el Consejo Político Estatal, lo mismo que el comité directivo municipal de Cajeme, el cual tenía ya un «vencimiento» de más de cuatro años, sobre los casos de los CDM de Hermosillo y Nogales, comentó que aún no han recibido la autorización del CEN para emitir la convocatoria correspondiente.

Tema ineludible fue la reforma a la Ley Orgánica de la Universidad de Sonora, sobre lo que opinó que tal como la propuso el Ejecutivo y seguro así se aprobará en el Congreso, sí lesiona la autonomía de la casa de estudios, pues de en manos de los diputados la elección de sus cuadros directivo, al estar bajo su férula el Poder Legislativo.

De igual forma, el ex alcalde de Cajeme; ex diputado federal, dos veces legislador local y ex titular de SEDESSON, criticó la rampante inseguridad que afecta la vida de la comunidad sonorense e hizo hincapié en lo que ocurre en su natal Ciudad Obregón, considerada entre las poblaciones más violentas e inseguras del mundo; lo mismo que le falta de recursos del Gobierno Federal para entidad.

Opinó, respecto a Zaira Fernández y Pascual Soto, que él mantendrá su política de buscar acercamientos con ellos, pese a que estos no aceptan dialogar; pero que su postura de rechazo el diálogo no está por encima de la gran tarea que en estos momentos tiene como dirigente formal del PRI Sonora hasta el 2026.