Buscamos que Ímuris no sea más el “patio trasero” de Magdalena y Nogales, ni solo “el municipio de las quesadillas”
Al acudir como invitado a la Mesa Cancún, el alcalde de Ímuris, Jesús Leonardo García Acedo, hizo un recuento de la problemática que aquejaba a este municipio al momento de asumir el cargo, entre los que destacan los adeudos con la paraestatal CFE por 1.8 millones; 660 mil y 180 mil pesos, por concepto de consumo de energía eléctrica, los cuales lograron saldar para que tuvieran luz algunas colonias.
Otro es la poca recaudación por el servicio de agua potable, lo cual se originó en una política de tinte electorero que llevó a la costumbre del no-pago por parte de los usuarios. Dijo que se ha avanzado en este tema; pero no lo suficiente, pues en el mes de julio se facturó entre 500 y 600 mil pesos, mientras que la recuperación no llegó ni a la mitad.
Leonardo García, en su exposición ante los “cancunes” puso de manifiesto la difícil situación financiera por la que atraviesan la gran mayoría de los municipios pequeños, como el de Ímuris, que apenas llega a los 20 mil habitantes, en la que prevalecen la falta de recursos para obras de infraestructura.
Ante esto, dijo que a estos municipios se les cuestiona que no tengan proyectos ejecutivos de las obras prioritarias, a lo que responde que “los proyectos ejecutivos cuestan mucho dinero, a veces más que las mismas obras”.
Su relato, lejos de ser un rosario de quejas, es la descripción de la triste realidad de Ímuris que, pese a estar ubicado a unos cuantos kilómetros de la frontera más importante del país como es Nogales y de otra ciudad como Magdalena, se ha quedado rezagado y convertido en “el municipio de las quesadillas” y prácticamente en “el patio trasero” de las poblaciones mencionadas.
Indicó el alcalde García Acedo que recibió el Ayuntamiento de Imuris con al menos 25 años de atraso en todos los aspectos, que se han hecho grandes ajustes en las finanzas para no endeudarse más y dio a conocer que con los ahorros logrados gracias a esa disciplina en el gasto impuesta desde el inicio de su gestión, se pudo pagar por adelantado los aguinaldos de los trabajadores municipales, sin necesidad de contraer deuda.
Ha sido un camino difícil, subrayó Leonardo García, al dejar asentado que los baches y la basura son los grandes retos del gobierno de Ímuris. “Nos encontramos un solo camión recolector (y en pésimo estado); acudimos a la instancia del Gobierno del Estado para ver si podíamos conseguir recursos para comprar otro; pero no pudimos lograrlo”.
El presupuesto de este 2022 fue de 57 millones de pesos, monto que ya estaba muy comprometido por los adeudos heredados de otras administraciones, por lo que no se pudo realizar obra. “Sin embargo, salimos adelante gracias a que realizamos diversas actividades”.
En cuanto al obligado tema de la inseguridad, Leonardo García afirmas que en Ímuris no ha habido un solo conato de violencia en toda nuestra administración y que eso se ha logrado con el acercamiento y comunicación constante con la gente, además de mantener rondines permanentes de vigilancia. “Además tenemos una muy buena coordinación con las diferentes corporaciones policiacas y con la Guardia Nacional.
También apuntó que es muy difícil la situación económica del micro productor del campo en ese municipio, a quienes no les han favorecido con créditos y que es uno de los asuntos que tiene pendientes de gestionar ante las instancias correspondientes.
Considera que la relación y comunicación con el Jefe del Ejecutivo Alfonso Durazo, es en términos de cordialidad. “Así nomás”, precisó. En cuanto al diputado local Fermín Trujillo y la diputada federal Ana María Bernal, ellos han contribuido a llevar a cabo algunas acciones en beneficio de la comunidad.
También comentó que uno de sus proyectos es convertir as Ímuris en el municipio cultural del norte del estado y que se han realizado importantes festivales como el de Eduardo Pierson, entre otros.
En las elecciones pasadas, Leonardo García Acedo fue el único candidato del PRI que no fue en alianza con el PAN y el PRD y respecto a si está interesado en un cargo futuro, solo comentó que tres años es un tiempo insuficiente para aterrizar muchos de los planes y proyectos y fue tajante al responder que no le interesa ni quiere tener acercamientos con el partido MORENA. “Mis convicciones son por completo priistas y no me moveré de mi partido. Además, sabiendo trabajar, nadie necesita irse a ningún otro lado”.