Durante agosto aumentaron las hospitalizaciones de niños en Estados Unidos a causa del Enterovirus D68, un padecimiento que provoca síntomas similares a los de la influenza, según informaron los Centros de Prevención para el Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés).
El informe sobre la enfermedad, lanzado el 9 de septiembre, señala que el registro de niñas y niños con Enterovirus confirmado en julio y agosto fue superior al mismo periodo de los últimos tres años (2019, 2020 y 2021).
Por lo anterior, la dependencia preventiva de enfermedades en Estados Unidos hizo una serie de recomendaciones a los centros de atención médica para cuidar a los niños, quiénes pueden padecer enfermedades agudas y graves a causa del virus.
La Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Química (SEIMC), explica que hay diferentes enterovirus que puede portar el ser humano, y uno de ellos es el poliovirus, causante de la enfermedad poliomielitis, que en muchos casos puede ser mortal.
Dicho enterovirus de la poliomielitis puede confundirse en una primera instancia con el enterovirus D68; sin embargo, el D68 es más leve y genera problemas respiratorios y musculares.
Los CDC dijeron que esta enfermedad fue conocida desde 1962; sin embargo, no se había propagado en los Estados Unidos sino hasta 2014, y su último brote ocurrió en 2018.
Estos son los síntomas del Enterovirus D68
Los síntomas leves pueden incluir:
Moqueo.
Estornudos.
Tos.
Dolores en el cuerpo y los músculos.
Los síntomas graves pueden incluir:
Sibilancias en la respiración.
Dificultad para respirar.
“El enterovirus D68 puede causar también mielitis flácida aguda, una afección neurológica poco frecuente pero grave que afecta principalmente a los niños y hace que los músculos y reflejos del cuerpo se debiliten”, explican los CDC.
La instancia médica urgió a los centros de salud en Estados Unidos a no descartar a ninguno de los niños con las molestias señaladas anteriormente, ya que pueden padecer el enterovirus. Con lo anterior, también se dijo que era necesario hacer pruebas en todos los casos ante la escalada de contagios.
Finalmente, los CDC concluyen que esta enfermedad se contagia a través de la saliva, como también ocurre con casos de COVID-19.