Rosario Robles, exsecretaria de Desarrollo Social, salió del penal Santa Martha Acatitla después de permanecer tres años en prisión por su presunta responsabilidad en el caso conocido como la Estafa Maestra.
Vestida con un abrigo rojo, la exfuncionaria durante el gobierno de Enrique Peña Nieto salió del penal en que ingresó en agosto de 2019, luego de que la Fiscalía General de la República (FGR) solicitó cambiar la medida cautelar, por lo que enfrentará su proceso penal en libertad, pero tendrá que firmar cada 15 días y tiene prohibido abandonar el país.
“Muy feliz de que se hizo justicia, porque como lo dije desde el primer día que yo soy inocente y que estoy absolutamente dispuesta a comparecer ante las autoridades competentes, pero desde luego como tenía derecho, como tengo derecho: en libertad”, dijo al salir de prisión.
Fuera de la cárcel la esperaban su hija Mariana Moguel en compañía de demás familiares y amigos, quienes entre lágrimas recibieron a la exsecretaria; luego, ofreció un breve mensaje a medios para asegurar que su caso marcó un precedente.
“Tres años, pero tres años de mucho aprendizaje, de fortalecimiento, de vivir la injusticia en carne propia y de saber que tenemos jueces de amparo y magistrados que son muy justos. No todo está mal en nuestro sistema de justicia y creo que ahora siguen muchas más detrás de mí”, expresó.
En ese momento aprovechó la oportunidad para recordar que hay muchas mujeres presas en Santha Marta Acatitla que están ahí de manera injusta o muchas otras “que por circunstancias injustas de la vida,, por sus exparejas, están pagando por lo que no deben”.
«Ahora lo que sigue es descansar, cuidar de mi salud, estar en mi casa y ya vendrán otros tiempos. Quiero disfrutar a mi familia, a mis amigos después de este tiempo», agregó.
Robles Berlanga está acusada de ejercicio indebido del servicio público en el caso conocido como la Estafa Maestra, un desvío de cinco mil millones de pesos del erario público.
De acuerdo con la Fiscalía General de la República (FGR), el pasado 17 de agosto Robles, de 66 años, presentó una solicitud de cambio de medidas cautelares para poder seguir su proceso en libertad debido a que padece hipertensión, rinitis crónica y problemas en la cadera, los cuales fueron acreditados durante su encierro, aceptando la imposición de restricciones que la ley marca.
“Esta institución valoró el estado de salud de esta persona y las medidas de seguridad que garanticen su presencia en el proceso, por lo que solicitó al Juez de Control su anuencia para modificarle la medida cautelar de prisión preventiva justificada”, añade la tarjeta informativa.
Aún no es inocente, tiene que enfrentar el proceso: abogado
Por su parte, el abogado Epigmenio Mendienta recordó que con la liberación de Rosario Robles no se establece que sea inocente, pues el proceso ni siquiera ha iniciado.
“Con esto Rosario Robles no es inocente. Rosario Robles tiene que enfrentar el proceso y tendrá que demostrar si es o no (inocente) o la declaran culpable, pero hoy tiene tiempo para recabar todas las pruebas necesarias para argumentar su inocencia”, explicó.
Sobre los argumentos para poder obtener la libertad, explicó que se tuvo que presentar un domicilio para poder recibir las notificaciones, demostrar la disponibilidad para presentarse ante las autoridades y, sobre todo, mostrar las pruebas de la evolución de sus enfermedades y estado de salud.
Para el cambio de medida cautelar, Rosario Robles tuvo que entregar sus documentos a efecto de cumplir con la prohibición de salir del país y aceptar firmar cada 15 días ante la FGR.
Por lo pronto, y aunque aún hay amparos en proceso, el abogado aseguró que ya se pudo comprobar que la licencia expuesta como prueba en su contra fue apócrifa, que sí tiene arraigo en la Ciudad de México, que no tiene la capacidad económica que aseguraba la FGR y sobre todo tiene toda la disponibilidad para someterse al proceso en su contra.