La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó por primera vez el uso de una segunda vacuna de refuerzo contra la Covid-19 en los grupos más susceptibles de desarrollar un cuadro clínico grave, tras observarse un declive de la inmunidad frente a la variante Ómicron.
Esos grupos incluyen a todas las personas mayores (cada país debe establecer a partir de qué edad, según criterios nacionales), a las personas inmunodeprimidas, a todos los adultos con enfermedades crónicas, así como a embarazadas y al personal sanitario.
El intervalo ideal entre el primer y el segundo refuerzo debe ser de entre cuatro y seis meses, el mismo periodo en el que se ha visto que la efectividad de las vacunas contra Covid empieza a disminuir. Si este plazo se supera, la persona de riesgo debe ser vacunada en cuanto sea posible.
¿Cuántas veces más tendremos que vacunarnos?
Los estudios científicos han mostrado que, a medida que la pandemia ha quedado dominada por la variante Omicrón, la inmunidad que ofrecían las vacunas o la generada por una infección anterior va disminuyendo “no de manera muy significativa, pero lo suficiente para casos severos”.
“Hacemos esta recomendación con base a la información que tenemos ahora, pero no es una proyección hacia el futuro. No estamos diciendo que de ahora en adelante habrá que vacunarse cada cuatro o seis meses, veremos cómo evoluciona la pandemia”, declaró a la prensa uno de los expertos del grupo que asesora a la OMS en esta materia, Joachim Hombach.
No obstante, el documento emitido por el grupo de la OMS señala que “es probable que se requerirán dosis adicionales dentro de los cuatro a doce meses después del segundo refuerzo, especialmente entre personas vulnerables a una enfermedad grave o en riesgo de morir”.
Hombach también aclaró que la recomendación de un segundo refuerzo (en la mayoría de casos sería la cuarta dosis) no está dirigida a la población adulta sana, entre quienes se ve un riesgo muy bajo de sufrir un covid severo.
Al respecto, el presidente del grupo, el científico mexicano Alejandro Cravioto, mencionó estudios recientes que indican que la mitad de la gente que contrajo ómicron no lo sabía porque no tuvo síntomas, lo que puede ofrecer nuevas pistas sobre el funcionamiento de la inmunidad natural frente a esta variante.
El grupo de expertos en inmunización de la OMS celebró una reunión extraordinaria en la que examinó la evolución de la pandemia desde el punto de vista de la vacunación y también concluyó que los países pueden considerar administrar las vacunas contra la Covid-19 junto con la vacuna contra la gripe.