En un contundente llamado a las autoridades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en el estado, Javier Villarreal Gámez, dirigente de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), Isabel Velázquez Rendón, secretaria de Bienestar Social, y Oscar Ortiz Arvayo, líder de la central obrera en Hermosillo, denunciaron la grave situación que atraviesan los servicios médicos del IMSS en Sonora, calificando el panorama como “deplorable e insostenible”.

Durante una conferencia de prensa previa a la Asamblea Estatal Plenaria de la CTM Sonora, que se realizará los días 28 y 29 de noviembre, Villarreal Gámez subrayó que el hartazgo no solo afecta a los derechohabientes, sino también al personal médico y administrativo del instituto. “Estamos hasta la coronilla de la falta de buen servicio. La sobresaturación de urgencias, el desabasto de medicamentos y el hacinamiento de pacientes son solo la punta del iceberg de una crisis que ha llegado a niveles extremos”, expresó.

El dirigente estatal reveló datos alarmantes, como la falta de equipamiento médico operativo y la insuficiencia de camas hospitalarias, quirófanos y especialistas. Señaló que actualmente hay 331 plazas vacantes de médicos especialistas en el estado, lo que agrava la problemática de atención y genera retrasos en diagnósticos y cirugías. “Es inhumano que los pacientes tengan que esperar meses para una cirugía, solo para descubrir que los estudios médicos necesarios ya vencieron porque no hay equipo ni materiales suficientes”, denunció.

Por su parte, Oscar Ortiz Arvayo destacó una práctica que calificó de “criminal”: mantener cerradas las puertas de clínicas y hospitales durante la madrugada, obligando a los pacientes a esperar afuera en condiciones extremas. “Con los climas extremos de Sonora, no es aceptable que las personas enfermas tengan que permanecer fuera de las instalaciones. Es un derecho humano básico que las puertas estén abiertas para que los pacientes puedan esperar protegidos”, aseveró, haciendo un llamado urgente a la delegación del IMSS en Sonora para eliminar esta práctica.

Los líderes sindicales insistieron en la necesidad de soluciones inmediatas y contundentes, como la remodelación planeada de las unidades médicas, el fortalecimiento de la infraestructura hospitalaria y el cumplimiento de compromisos como el pago del bono de zona de vida cara, establecido en la misma Ley del Seguro Social, lo que incentivaría la llegada de médicos especialistas.

Además, Villarreal Gámez recordó que, desde 2019, el director del IMSS, Zoé Robledo, prometió la construcción de seis hospitales en el estado, pero solo uno está en proceso. “Es inadmisible que se sigan haciendo promesas vacías mientras miles de familias sonorenses padecen la crisis de un sistema de salud que debería protegerlas”, sentenció.

La Asamblea Estatal Plenaria de la CTM analizará este grave diagnóstico en mesas de trabajo, con la intención de tomar acuerdos que, según Villarreal Gámez, podrían ser “bastante fuertes” si no se vislumbran soluciones reales. “La seguridad social es un derecho, no una concesión, y desde la CTM no permitiremos que esta crisis siga cobrando vidas humanas”, concluyó.